Descripción
Superar ráìdos, remolinos y corrientes torrenciales proporciona todas las sensaciones propias de una situación límite pero con riesgos controlados. Existe una modalidad de descenso de aguas bravas para cada aficionado, según su afan de emociones y el esfuerzo físico que desee realizar. Rafting, la aventura controlada, requiere compenetración y espíritu de equipo. Hidropedd o Hidrobob, para los amantes del riesgo, un descenso en íntimo contacto con el agua. Piragüismo, en kayak o canoa, una modalidad para los más deportistas y los partidarios de la aventura individual.