Descripción
El buque de línea, símbolo e instrumento del poder naval durante el siglo XVIII, es ante todo una plataforma artillera diseñada para el combate en línea de fila. El empeño de las potencias navales, es lograr un tipo de buque capaz de mantener su posición en la línea de combate, sobrevivir al fuego enemigo y a su vez, liberar la máxima potencia de fuego. Los combates navales del siglo XVIII son duelos artilleros a distancias muy cortas, en donde lo que cuenta no es la precisión, sino la potencia del fuego, es decir, el peso de munición que, por banda, es capaz de disparar el buque. El arma naval por excelencia en este siglo es el cañón de hierro fundido de anima lisa y avangarda. (SIN STOCK, AGOTADO EN EDITORIAL)